¿Cuántas veces os ha pasado ir por la calle y pisar algo que no debíais?
La respuesta supongo que será similar para la mayoría: muchas veces.
Andar por la calle, despistarte un momento hablando o por cualquier tontería y sin darte cuenta acabas pisando barro, chicles, y supongo que en peor lugar acabas pisando una caca de perro. Justo después de pisarla empiezas a “cagarte en todo dios”, pero ja es demasiado tarde para hacer algo. Poco puedes hacer, salvo restregar las zapatillas contra el suelo o contra césped, pero nunca se acaba marchando del todo, aunque empieces a limpiarlo con esmero. Y después te acompaña ese mal olor durante todo el día. Y como tengas que ir a un lugar público ese mal olor te hace sentir una vergüenza muy común entre todos nosotros, no sabes que hacer salvo agachar la cabeza entre la multitud.
Por eso se me ha ocurrido esta idea que consiste en una serie de láminas adhesivas a las suelas de las zapatillas, zapatos,… serian unas láminas de plástico que se engancharan a las suelas.
Serian muy fáciles de colocar, desenganchar como cuando desenganchas las cintas adhesivas del plástico de forrar los libros., y colocar en la suela del calzado.
Y entonces para la calle a seguir con la rutina del día a día. Y si entonces llegara el fatídico momento en el que pisas ciertas cosas, nada de líos: desenganchas la lamina adhesiva y a seguir. Sin malas caras ni preocupaciones de ningún tipo.
